Estoy creando de nuevo y tengo que deciros que estoy muy emocionada. Todavía balanceo entre maternidad y profesion, pero voy encontrando el equilibrio 🙂 Supongo que nos pasa a muchas mujeres en esta etapa de la nuestra vida.

Manos a la obra y  el primero que he hecho es trabajar la lana en su color original  – para volver a conectarme con ese material, que tanto me emociona y seduce con su tacto, su olor y su versatibilidad – para no alterar con los colores ese encuentro.

Acto seguido me he puesto a teñir con mis tintes preferidos, los de la natura. No es que tenga especial interes por el color rosa – aunque tengo que reconocer, que si que me gusta 🙂 – sino por el tinte utilizado, la rubia tinctorea, que es muy interesante…